Para hablar del vídeo de boda en Caldetes de Mireia y Eduard, tenemos que empezar nombrando a Moette Studio, unos Wedding planners que van a dar mucho que hablar. Conocimos a Jordi en una boda y fue un flechazo, así que pronto nos presentó al resto del equipo Moette: David y Nuria. Son un equipo top, con mucho rollo y llenos de buena energía. Si queréis una boda bien fiestera, ellos serán una gran elección.

Mireia y Eduard son una pareja de polos opuestos, de esas que se complementan a la perfección ¡forman un Ying Yang en toda regla! Mireia, más alocada y desordenada, pero con ese toque elegante; Eduard más perfeccionista y formal pero un el punto de locura necesaria para pasarlo en grande.

Fue una boda de las que nos gustan, de las que se celebran en un único espacio. Puede parecer una tontería, pero así se quita mucho estrés tanto a los proveedores (barriendo para casa, haha) como a los novios. Evitar múltiples desplazamientos durante el gran día es una muy buena opción para evitar ciertos imprevistos…

Una celebración con vistas al mar

En esta ocasión, la celebración tuvo lugar en la finca privada de la familia de Eduard. Un sitio absolutamente precioso emplazado en Caldes d’Estrac, con un jardín muy grande y muchos ambientes, haciendo muy fácil separar los espacios para los diferentes momentos y pudiéndose celebrar íntegramente al aire libre. 

La ceremonia estaba inspirada en el rito celta del lazo sagrado. El rito consiste en atar las manos entrelazadas de la pareja, formando un ocho (símbolo del infinito que simboliza la unión del masculino Sol y la femenina Luna, mientras se miran a los ojos y se prometen estar unidos como marido y mujer.

Un convite tipo cóctel sin mesas asignadas

Después de un pequeño aperitivo con mojito de bienvenida, empezó la comida tipo cóctel a cargo de Moncho’s Catering, con Piano Bar incluido, ¡una maravilla! Los convites tipo cóctel son una muy buena opción para novios que se quieren saltar un poco el protocolo y prefieran estar de un lado a otro disfrutando con sus invitados, sin estar anclados a una mesa presidencial.

Por último, la fiesta, que para cada vez más novios es el momento más importante, y eso a nosotras nos encanta 😉 Mireia y Eduard le dedicaron mucho de su presupuesto, pistolas de CO2, confetis, neones, y camisetas para todos… Y a modo de colofón metieron al novio en una bañera ¡vivan las fiestas locas!