El es catalán y ella venezolana, se conocieron por Tinder y su primera cita duro 3 días. ¡Amor a primer match! Ya en sus primeros meses de relación sabían que se querían casar, y imaginaron cómo sería su boda…

Tuvieron que esperar un año más de lo previsto para poder celebrar su gran día, Covid ya sabéis. Pero el 7 de agosto de 2021 llegó ese día tan esperado.

La boda de Rebeca y Albert fue en Can Macìa, una finca bodega en plena naturaleza, rodeada de extensiones de viñedos y almendro.

El se cambió en un hotel y ella en la misma masía, allí estaban todas: la novia, la madre, la hermana y las damas de honor maquillándose, peinándose con Laura de Bokehmakeup y derramaron algo de cava en las copas y en el suelo.

El vestido de Rebeca era de la diseñadora Odet Saük y el vestía traje de L’Art Nupcial.

Las bodas en Can Macìa pueden ser religiosas, tienen una pequeña ermita y los novios decidieron hacer la ceremonia al aire libre en frente de la misma. Fue una boda emotiva, oficiada por un cura italiano amigo del novio.

El aperitivo y el banquete estaban a cargo del catering de Espai Gastronomic. Para hacer el reportaje de novios en esta finca siempre vamos a las viñas que están justo al lado y dan mucho juego. Este día teníamos de compañeros fotógrafos a Pixan fotografía, una pareja encantadora.

Por último la fiesta de la boda fue preciosa, siempre se nota las bodas latinas, la gente baila, baila de verdad, y es un gusto verlo ¡y grabarlo!